C�line Cl�mence Magn�ch� Nd�

Licenciada en Lengua y Literatura, y doctorada en Filolog�a Hisp�nica en la Universidad de Zaragoza, C�line Cl�mence Magn�ch� Nd� (Camer�n, 1967) ha publicado art�culos dedicados especialmente a los cuentos y literatura oral africanos en las revistas Estudios de Literatura Oral, del Centro de Estudios Ata�de Olivera de la Universidad del Algarve (Portugal), Revista de Folklore, de Valladolid, o Paremia, de la Universidad Complutense de Madrid. Actualmente es profesora de Lengua y Literatura Espa�ola y Africana en la Universidad de Dschang (Camer�n). �ste es su primer libro.

  Sus actividades durante su estancia en Espa�a y en relaci�n a su trabajo en la ONG (AFFAMIR, asociaci�n para el bienestar de la mujer y de las familias del medio rural, creada en enero del 2002 y con sede en Ban�ghang, pueblo del oeste de Camer�n), ser�n comunicaciones, ponencias y charlas sobre la violencia institucional (la familia, las leyes, la escuela, etc. mantienen a la mujer camerunesa en un estado de subordinaci�n total tolerando y perpetuando el status quo) y estructural (sociedad) contra la mujer camerunesa; violencia que se manifiesta de varias maneras: no acceso a los bienes y factores de producci�n (tierra, dinero, fertilizantes, etc.), no tiene las mismas oportunidades que el hombre (educaci�n, infraestructuras vitales como los hospitales), acceso a la informaci�n, etc., violencia f�sica o maltrato, etc. Ella es la verdadera cabeza de familia pero no tiene recursos para cumplir con las enormes responsabilidades que le incumben: educaci�n, comida, salud, ropa, etc., de toda la familia. No tiene voz ni derecho, solo deberes. C�line Cl�mence Magn�ch� Nd� participa en un movimiento que tiene como objetivos: crear m�s espacio para la mujer, reforzar sus capacidades (econ�micas, sociales, educativas, etc.) para que pueda tomar las riendas de su destino. Algunos realidades son: una guarder�a para que pueda dejar a sus hijos e ir a trabajar o acudir a seminarios, la inminente apertura de un centro de formaci�n para que pueda formarse en distintos oficios (de costura a inform�tica o contabilidad, etc.), de una tienda para que se pueda comprar, con los pocos recursos existentes y a un precio preferencial, todo lo que necesita para cultivar. Estos proyectos han sido llevados a cabo gracias a la ayuda del Gobierno, la Fundaci�n Haurralde del Pa�s Vasco y el movimiento de Scout Makarenko de Barcelona

Volver